martes, 1 de marzo de 2016

Primer testimonio cuaresmal...

Al comenzar la cuaresma preguntaba a tres formandas, dos novicias y una postulante: ¿cómo desean vivir, ellas, la cuaresma en el monasterio dentro de este año de la misericordia? Comenzamos por presentaros el testimonio de Clara, una novicia:

" Creo que en presencia de Dios, manifestada en su actuar cotidiano. Actuando desde su interior, ofreciendo al Señor n secreto el ayuno, la limosna, la oración. Teniendo una relación íntima y particular con su Padre, bajo la practica de las obras de misericordia. Las corporales y las espirituales.
Pero, ¿qué tipo de ayuno sería? Creo, que sería el que en su interior el Señor le revele, Sería el que genere un efecto mucho mayor del que normalmente se conseguiría privándose de algo ajeno a la voluntad de su Señor. Quizá, dejar de estar triste por reconocerse pecadora, confiando en que su Padre la ama, no por pecar, sino por verse frente a Él, pobre y necesitada, sabiendo que sin Él nada puede.

A lo mejor, la limosna no sea la donación de dinero, o un beneficio para alguien ajeno a su persona; sino, su propia entrega a quien la precisa, su cuidado para la hermana que sin pedírselo, lo necesita.
Su oración, podría ser, la que sale desde su interior, donde no hay egoísmos, prioridades, exclusivismos o deseos personales. Creo, que es la que brotará con caridad, buscando a Dios sin ningún interés propio.

Seguramente, esta novicia, vivirá su día con alegría, asumiendo su vocación con responsabilidad y amor, esperando únicamente la recompensa dada por su Padre del cielo que ve en lo escondido y escuchándole decir: “ahora momento favorable”, “ahora día de salvación”.

Su búsqueda del tesoro inimaginable, denominado “Reino de los Cielos”, lo haría sirviendo y haciendo cuanto sea posible por aquellos que son imagen del Señor, esos pequeños: nuestros prójimos, a quienes tenemos más cerca, con quienes podemos realizar las obras de amor más nobles.

Finalmente, la esperanza de esta novicia, estaría fijada en la Resurrección de su Señor glorificado y encarnado en su propio Ser ".

Clara


No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Qué son los encuentros monásticos?...

¿Qué son los encuentros monásticos?...