La Palabra de Dios, de hoy, es sumamente rica en todos los aspectos. Me resulta difícil explicarla con palabras; sin embargo, voy a intentar meterme de lleno en la situación de estos hombres. Jesús tenía una forma característica de partir el pan y de pronunciar la bendición, y que tal vez fuera esto lo que hizo que le reconocieran. Lo que yo creo, es que lo que los discípulos ven en el gesto de Jesús de darles el pan es precisamente la entrega misma de aquel hombre, que se pone en sus manos. Este gesto puede ser interpretado como la misma eucaristía.
La manera en que una persona nos hace un favor nos permite conocerla bastante bien: de hecho, es toda la persona la que se manifiesta; ayer se marchaban unos jóvenes que han realizado un retiro con la comunidad, al marcharse nos regalaron un libro, el gesto con el que nos ellos entregaban el libro mostraban el amor, la gratitud... Este hecho de ofrecernos un regalo nos están revelando a las personas que están detrás de ese gesto. Pues bien, detrás del gesto que relata Lucas está Jesús entregándose, es decir, Jesús como eucaristía, Jesús dándosenos en el pan partido. En esto reconocemos a Jesús resucitado.
HOY TE INVITAMOS A QUE DETRÁS DE CADA GESTO DESCUBRAS A JESÚS RESUCITADO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario